Sin duda, el siglo XXI se encuentra marcado por los emprendedores, quienes no dudan en utilizar su ingenio, habilidades manuales o digitales para sacar adelante un negocio que empiezan de cero. Las características de un emprendedor están asociadas a tomar riesgos, sortear distintos obstáculos y, en muchos casos, desempeñar diversos trabajos uno mismo hasta que se comienza a crecer y pueda ampliarse el equipo.
La actualidad puso en cuestión la modalidad de trabajo en relación de dependencia tal y como la conocíamos hace diez o quince años: los bajos salarios, la precariedad y el auge de la tecnología llevan a muchas personas a emprender un negocio por su cuenta y tomar sus propios riesgos, aprovechando todo lo que la tecnología ofrece. Por supuesto, no siempre es tan sencillo como se lo pinta: implica saber detectar oportunidades y en muchos casos aprender a costa de errores.
¿Qué significa ser emprendedor?
El espíritu emprendedor es más bien una filosofía de vida. Las personas que emprenden poseen una actitud que constantemente busca oportunidades y sabe detectar las necesidades del momento. En el fondo, un emprendedor se dedica a leer la realidad y aportar su ingenio. Cabe preguntarse si el espíritu emprendedor es algo que ya posee la persona de por sí, o que se adquiere con el tiempo al querer desarrollar una idea.
Muchos desarrollan sus habilidades de tal manera que les permite convertirlas en un nuevo negocio para emprender. Para eso, se necesitan ideas innovadoras y llegar a la mayor cantidad de personas. Las redes sociales son los principales aliados de los emprendedores: quien tenga buen ojo para mostrar lo que hace sin duda llegará a conectar con su audiencia y a transmitir sus ideas, son la base para toda oportunidad detectada.
Se requiere de un gran coraje para lanzarse a aquello que a uno le apasiona, y sin duda eso es algo que caracteriza a lo que significa emprender: la unión del trabajo con lo que uno disfruta hacer, y la búsqueda de una actividad que permita desarrollarse a futuro y adaptarse rápidamente a los cambios que se requieren.
Por supuesto, quienes emprenden no sólo se dedican al mundo de los negocios. Están los emprendedores culturales, políticos, educativos, sociales, que buscan generar nuevas oportunidades a través de su área, y que muchas veces, también implica comenzar de cero.
¿Cómo emprender un negocio?
Si te estás preguntando cómo emprender un negocio, es necesario que pongas a prueba tu proyecto emprendedor. Puedes comenzar preguntándote si es una idea ingeniosa, si se tienen los recursos para la primera inversión que se requiere y a quién va a estar dirigido. Luego, evaluar si se trata de un bien comercializable o no.
Una vez que tengas las respuestas a estas preguntas, puedes comenzar a elaborar tu estrategia para emprender un negocio: contratar a quienes haga falta, armar tu branding en redes sociales, contactar a sponsors y mantenerte actualizado de las tendencias para identificar aquellas oportunidades que se adaptan a tus negocios.
Es importante que sepas que una vez dado el paso, te convertirás en un líder del que dependerá tomar las mejores decisiones para avanzar en su proyecto e innovar en el área que elijas y, en muchos casos, tomar riesgos para encontrar las metodologías que mejor se adapten a tu negocio. De esto se trata emprender un negocio.
Negocios que se pueden emprender en casa
Frente a la pregunta de cómo emprender un negocio desde casa, son incontables las experiencias de emprendimientos que comenzaron en hogares: desde creadores de softwares, plataformas de compra venta, aplicaciones, hasta negocios de ropa, productos elaborados a mano, pastelería, comida son sólo algunos ejemplos de tipos de negocio para emprender. Sólo hace falta una buena idea para comenzar.
¿Qué diferencias hay entre un emprendedor y un empresario?
Como mencionamos anteriormente, un emprendedor no necesariamente se dedica al mundo de los negocios, pero sí a la búsqueda de algo nuevo. Por lo tanto, una persona puede tener características de emprendedor aunque trabaje para una organización o empresa, al buscar la manera de mejorar o comenzar a dedicarse a una nueva área.
La diferencia más grande es que un empresario se dedica sobre todo a dirigir una compañía, de la que puede ser o no ser dueño, y busca generar ganancias y hacer que la empresa sea rentable. El emprendedor, en cambio, posee una actitud que se encuentra constantemente en búsqueda de lo nuevo hasta alcanzar el éxito. Por lo general, está acostumbrado a tener responsabilidades debido a que suelen empezar solos, hasta ir creciendo de a poco.
A su vez, por lo general, una característica del emprendedor es que comienza desde muy abajo: arriesga el poco capital que tiene y trabaja desde su casa o un cowork, mientras que un empresario ya posee una compañía fija. La gran diferencia es el riesgo: un emprendedor puede ser prudente, pero su comienzo con algo nuevo puede ser muy arriesgado. Un empresario va a lo seguro: analiza su estrategia y evita correr los menos riesgos posibles.
Vale aclarar que muchas veces empresarios y emprendedores trabajan en conjunto, aprovechando las cualidades de cada uno de los perfiles para aportar a un fin común.
¿Cuáles son las características de un emprendedor?
Ahora bien, ¿cuáles son las características de un emprendedor? Te contamos un poco sobre lo que destaca e identifica a una persona emprendedora:
Pasión: la pasión por lo que disfruta hacer es lo que hace que un emprendedor se encuentre constantemente motivado, lo que le lleva a cumplir sus metas y a aprender lo que necesite constantemente.
- Iniciativa: los emprendedores tienen una gran determinación para cumplir con sus objetivos y aprovechan toda herramienta que esté a su alcance para hacer crecer su proyecto. Buscar sponsors, usar las redes sociales y hacer colaboraciones son un mero retrato de esta actitud.
- Creatividad: el espíritu emprendedor siempre busca adaptar un negocio o proyecto a lo que requiere una realidad. Supervisar cada detalle para que vaya acorde a lo que se busca y crear una identidad ponen a prueba una y otra vez la creatividad de los emprendedores.
- Ingenio: sin duda, el ingenio va de la mano de la creatividad. Es lo que hace que pueda mejorar constantemente lo que se requiere para hacer crecer un proyecto.
- Ganas de aprender: característica fundamental en todo emprendedor, debido a que es muy probable que tenga que encargarse de diversas tareas hasta lograr que su proyecto crezca. Para eso es necesario que pueda aprender rápidamente todo lo que le permita proyectarse a largo plazo. Sólo se puede emprender aprendiendo.
- Perseverancia: el camino del emprendedor no es sencillo: requiere tener en claro hacia dónde se quiere llegar y perseverar en todo lo que permita alcanzar la meta.
- Organización: organizarse es la clave para todo emprendedor. Al principio uno puede verse abrumado por la cantidad de tareas a cumplir, pero con organización siempre se puede avanzar.